El Hotel Nesrine se encuentra situado en la misma costa de Túnez, a unos 500 metros de una playa privada, y a 6 kilómetros del centro de Hammamet.

Las habitaciones del Nesrine, todas tienen aire acondicionado y una piscina al aire libre. Dentro de las habitaciones, se puede apreciar desde la misma entrada, el resplandor de los azulejos blancos y un balcón privado, que puede ser utilizado para tomarse el desayuno, que cada mañana llevan a la misma habitación, a menos que los huéspedes decidan servírselo en el restaurante.

En el restaurante, pueden encontrar cocina hecha a la parrilla. En la terraza muchos van a sentarse para beber una copa mientras navegan con su computador, a menos que encuentren a alguien interesante con quien conversar.

Entre las instalaciones figuran una cancha de tenis y un campo de golf. A muy pocos minutos caminando, está la estación de tren de Hammamet, además de un aparcamiento privado gratuito en el mismo lugar.

Hay huéspedes que deciden encargar al hotel su traslado hacia el aeropuerto, cosa que es mucho mejor que tomar un autobús local. Quizás la segunda mejor alternativa para transportarse de una manera más fiable sea ir al centro de la ciudad a tomar un taxi, y la tercera, alquilar un vehículo propio, aunque yo dejaría esta opción de lado si es por quedarse pocos días en la ciudad, ya que si no se conocen las calles, la dirección del tránsito y los reglamentos locales, puede resultar algo bochornoso andar por ahí, así que mejor que maneje un local y uno ir tranquilo mirando el camino.

Vía/ Tunisia