El Hotel Abir Djerba es ideal para los viajeros que andan con un presupuesto apretado, porque es un establecimiento sin grandes pretensiones, ubicado muy cerca de la playa.
Entre sus mejores virtudes, tenemos que considerar su ubicación, muy cerca de zonas de descanso, como piscina y jardines, y su ambiente cálido, aunque el lado B del hotel es que no está directamente al lado de la playa y que las habitaciones ofrecen un confort limitado.
Este hotel data de 1998, y es desde el 2001 que hay un pequeño centro de bienestar con tratamientos a base de algas y lodos marinos. Los tratamientos más populares que se ofrecen son los tratamientos para la espalda, las piernas y el rostro, además de envolturas, duchas a presión y masajes relajantes.
El edificio se divide en tres partes. Las habitaciones están en el primer piso, que es donde está la recepción. La zona cercana al jardín dispone de una piscina de 600m2, con una amplia losa que está dispuesta para tomar sol. Hay también unas instalaciones deportivas ubicadas entre la terraza y la playa, situada a unos pocos metros del hotel y a la que se accede a través de un camino bien delimitado. La playa tiene bar, sombrillas y duchas.
Hay habitaciones tipo estándar, triple y familiar, decoradas con muebles simples en tonos azules celestes. Al menos hay aire acondicionado, así no se mueren de calor en la mitad de ese desierto tunecino. Lo que sí, no hay televisión ni minibar en las habitaciones, y esto se debe contratar de forma adicional, cosa que encuentro ridícula porque hasta en el más humilde de los alojamientos del mundo, siempre hay aunque sea un tarro de tv instalado en cada habitación…así que un cobro extra por ver tv y quizás otro cobro por ver el cable, es demasiado.
Todas las habitaciones del primer piso tienen su balcón y vista a los jardines. Hay un solo restaurante en el hotel, una sala y un bufé muy variado con platos de toda índole. A diario se ofrece un plato típico de la región, como el tajine o el cuscús. Para los que tengan hambre entre comidas, tienen un snack-bar con bocadillos y pastelería tunecina.